La esposa de Di María reconoció que se fueron del Real Madrid por dinero

No le gustaba su vida en Manchester 

Jorgelina Cardoso, esposa de Ángel Di María, confesó los motivos por el que el argentino dejó las filas del Real Madrid y aceptó la oferta del Manchester United, que era difícil de rechazar.

[themoneytizer id=”35035-28″]

 

“Horrible. Manchester es lo peor, es todo horrible. Le metimos toda la onda. Peleamos mucho con Ángel. Miren, nosotros estábamos en Madrid y Ángel jugaba en el que para mí es el mejor equipo del mundo. Estábamos perfectos. El clima era perfecto, la comida fantástica. Y de pronto vino un día y me dijo: ‘Salió esta propuesta de Mánchester”, explicó Jorgelina Cardoso a ‘Eltrece TV’.

“Yo le avisé que ni en ped*, que se iba a ir solo. ‘Sí, sí, nos vamos’, me responde. Había mucho dinero, incluso después los españoles salieron a decirnos peseteros. ¡Y sí lo fuimos!”, añadió Cardoso.

Noticias destacadas

“Si trabajas en una empresa y viene la competencia a decirte que paga el doble, ¡te vas corriendo!. Es horrible, horrible”, añadió.

“Yo no quería ir. Soy amiga de Gianinna Maradona, estaba en pareja con el Kun Agüero, y nos fuimos a visitarlos a Manchester. Cuando nos volvimos, le dije a Ángel: ‘Que te compren de cualquier país menos de Inglaterra, es una mierda’. Era horrible, no me gustaba nada. La gente toda blanquita, prolija. van caminando y no sabés si te van a matar, pintadas las minas; estupendas, las minas todas de porcelana”, confesó sobre los motivos.

Ahora puedes recibir las noticias más destacadas del día. Ingresa a este link (Whatsapp – Telegram) para que no te pierdas nuestro mejor contenido.

Gráfica: tn.com.ar

El contenido de visionnoventa.net está protegido bajo las leyes internacionales de derecho de autor. Si requiere usar nuestro contenido, por favor contáctenos. Absténgase de usar nuestro contenido sin autorización.

[themoneytizer id=”35035-16″]

 

Artículo anteriorLa Bundesliga será la primera en volver
Artículo siguienteDetienen a un jugador del Angers por masturbarse en público